Cada caso se valora individualmente para adaptar el diseño y el color al pigmento previo. Buscamos equilibrar el trabajo existente y lograr un resultado más armónico y actualizado.
El objetivo del cover-up es mejorar sin sobrecargar. Respetamos la base del trabajo anterior, suavizando tonos y líneas para conseguir un acabado natural y favorecedor.
Reformulamos el diseño teniendo en cuenta la morfología facial y las proporciones. De esta forma, conseguimos un delineado o ceja que se integra con tus rasgos actuales.
En ocasiones, el proceso puede requerir más de una sesión para alcanzar el resultado deseado. Trabajamos de forma progresiva para cuidar la piel y preservar su salud en todo momento.
Tenía un trabajo antiguo que me incomodaba y no sabía si tenía arreglo. En BSH Micro lo valoraron con cuidado y el resultado fue increíblemente natural. Nadie nota que es un cover-up.
— Laura Méndez
Vine por recomendación y no puedo estar más contenta. Supieron corregir mi antiguo delineado sin necesidad de borrado. El cambio fue sutil, limpio y totalmente adaptado a mi rostro.
— Andrea López
El trato fue excelente desde el primer momento. Me explicaron todo el proceso del cover-up con claridad y el resultado final superó mis expectativas. Se nota el cuidado en cada detalle.
— Paula Ramírez
Mi anterior pigmento estaba muy oscuro y desigual, y consiguieron neutralizarlo con mucha precisión. El nuevo tono se ve natural y favorecedor, no pensé que fuera posible.
— Sara González
Muy profesionales y atentos. Analizaron mi caso antes de empezar y me hicieron sentir segura durante todo el tratamiento. El resultado luce suave, natural y completamente renovado.
— Natalia Romero



